lunes, 27 de septiembre de 2010

Solidaridad


Los bancos pusieron crisis en la economía, los gobiernos pobreza, reformas laborales y paro en los trabajadore/as. El Fondo Monetario Internacional (FMI) hambre en el mundo.

El 29 de Septiembre, está convocada una Huelga General en el estado Español, es la continuación del paro generalizado, que entre el 10 y el 13 de Agosto de 1917, UGT y CNT extendieron por todo el país, contra el caciquismo coronado de Alfonso XIII y el pistolerismo de la patronal.

El 29-S prorroga la exitosa del 14 de Diciembre de 1988, que puso tumba al abaratamiento del despido que pretendía el ejecutivo de Felipe González.

El 5 de Octubre de 1934, los obreros interrumpieron las empresas en ayuda de la democracia que la derecha de la CEDA, hacía peligrar. Y el 18 de Julio de 1936 se secundo en protección de la constitución de 1931 y de las leyes y los derechos colectivos que imponía.

El 20 de Junio de 1985 ya se perseguía finalizar con el sistema público de pensiones y se encontraron con la CCOO de Marcelino Camacho y otras organizaciones sindicales como USO y CNT. El 27 de Enero de 1994 aparecieron las empresas de trabajo temporal, el tijeretazo a las prestaciones de desempleo y el formato del contrato precario, otra respuesta limito sus fines.

La Huelga General del 20 de Junio del 2003 arrojo a la basura, el decretazo del gobierno Aznar. Ahora vuelven a la carga, a finiquitar las conquistas sociales que la clase obrera, gano mediante la movilización y la lucha y que costo sangre, rejas, paredones y torturas a la misma.

Los abajo firmantes, apoyamos el 29-S y la Huelga General, en detrimento de las políticas neoliberales y por otro modelo económico al servicio de la causa de la humanidad y sustentable con la naturaleza. La única salida a la crisis del capital es la aplicación de la declaración universal de los derechos humanos.

El 29 de Septiembre, paramos para ser más felices.

Silvia Delgado Fuentes. Poeta
Marisa Peña Fernandez. Profesora de literatura y Lengua. Poeta
Eduardo Andradas de Diego. Miembro de Cultura Indigente.Poeta
Luis Felipe Barrio. Cantautor
Matias Avalos .Cantautor
Ana Perez Cañamares. Poeta y Narradora


sábado, 25 de septiembre de 2010

Para instalar la memoria en las escuelas

El material fue editado por el Ministerio de Educación nacional y será distribuido entre docentes de escuelas secundarias de todo el país. Aborda “tres acontecimientos del siglo pasado que dejaron su huella en el presente”.

Por Eduardo Videla

¿Hubo resistencia a la implementación de las políticas de exterminio implementadas por el régimen nazi? ¿No podían desertar los soldados antes de ser enviados a Malvinas por la dictadura de Galtieri? ¿Es posible relacionar el Holocausto con la última dictadura? Estas y otras preguntas y los textos que permiten elaborar las respuestas forman parte del trabajo presentado esta semana por el Ministerio de Educación: la Colección Educación y Memoria, integrada por los libros Pensar Malvinas, Holocausto. Preguntas, respuestas y propuestas para su enseñanza y Pensar la dictadura: terrorismo de Estado en Argentina. “Son tres acontecimientos del siglo pasado que no están cerrados, dejaron su huella en el presente y merecen ser trabajados en la escuela para que no se olviden”, dijo a Página/12 Mara Brawer, subsecretaria de Equidad y Calidad Educativa y responsable de la colección.

El material está destinado a docentes de escuelas medias de todo el país y viene a llenar un hueco documental y teórico para trabajar en las aulas temas de importancia fundamental. “Muchos docentes están muy comprometidos con estos temas pero muchas veces no saben cómo hablarles del horror a sus alumnos”, comentó Brawer.

El fragmento de una carta de Mordejai Anielewicz, uno de los líderes de la rebelión del gueto de Varsovia, en abril de 1949, contribuye a responder una de las preguntas enunciadas al comienzo de esta nota. “Varias compañías nuestras atacaron a los alemanes que huían”, relata, en una descripción del combate que duró alrededor de un mes. Aunque luego admite que en las condiciones en que viven “solo una minoría podrá resistir. El resto morirá tarde o temprano”.

“El Holocausto es la primera acción sistemática de un Estado en pos de un genocidio”, evalúa Brawer para explicar por qué se eligió ese tema como eje de uno de los materiales editados. “Buscamos que los textos no sólo contribuyan a saber lo que pasó, sino cómo y por qué pasó”, agregó la funcionaria. Con ese objetivo, los trabajos tienen no sólo material informativo, sino documentos y testimonios, así como propuestas y sugerencias de ejercicios para trabajar con los estudiantes.

El texto que invita a Pensar Malvinas, en tanto, comienza con un relato sobre la guerra de 1982 y el contexto en que se dio, recoge testimonios y relatos de ex combatientes, conscriptos y también oficiales, como el del comandante del Crucero General Belgrano. Recorre luego la historia previa de las islas, incluyendo la figura mítica del gaucho Antonio Rivero, que encabezó una rebelión en 1833, y la expedición del grupo de jóvenes peronistas y nacionalistas de 1966, el llamado Operativo Cóndor. El material se detiene a analizar el tratamiento que los medios de comunicación le dieron al conflicto y la literatura inspirada tanto en los combates como en sus secuelas en quienes participaron del conflicto.

“En uno de los talleres previos a la redacción de estos materiales, uno de los chicos preguntó por qué los jóvenes conscriptos que habían sido convocados para participar en la guerra no desertaron”, recordó Brawer en diálogo con este diario. “Desde la perspectiva actual, es difícil comprender que eso era imposible en el contexto de la dictadura”, agrega.

Esos talleres previos, realizados con estudiantes y docentes en distintas provincias, contribuyeron a elaborar las preguntas y las respuestas que conforman los textos. El material incluye propuestas para trabajar en el aula: consignas para discutir, realizar nuevas investigaciones o producir nuevos textos.

En el texto para Pensar la dictadura se encuentran materiales a los que docentes y estudiantes no podrían acceder sin realizar un riguroso trabajo de investigación. La primera solicitada publicada por las madres y esposas de desaparecidos, en octubre de 1977; la lista de canciones y libros censurados por el régimen; las postales que la revista Para Ti incluía en sus ediciones para que sus lectores envíen al exterior como canallesca desmentida de las denuncias de violaciones de derechos humanos, se reúnen en el mismo tomo con la anécdota relatada por el periodista Juan José Panno, que da cuenta de la represión a los hinchas de Nueva Chicago, cuando cantaron la marcha peronista después de festejar un gol de su equipo.

Otro documento relevante es el fragmento del diálogo entre el periodista y empresario Jacobo Timerman y su torturador, el general Ramón Camps, que contribuye a responder la pregunta sobre la vinculación entre Holocausto y dictadura: “Si exterminamos a todos habrá miedo por varias generaciones”, se definió el represor. “Es lo que intentó Hitler –le respondió su prisionero–. Y, sin embargo, quedaron en algún lugar, en alguna memoria, registrados sus nombres, sus imágenes, sus ideas.” “Hitler perdió la guerra. Nosotros ganaremos”, replicó Camps.

Para Brawer, la discusión es importante porque “algunas ideas autoritarias vigentes durante la dictadura siguen presentes”. Para ilustrar, mencionó lo ocurrido el mismo día de la presentación: “Un contingente escolar no vino porque el supervisor entendió que era peligroso venir al ministerio, pues ese día había una manifestación estudiantil”. Los tres tomos fueron presentados el jueves por el ministro Alberto Sileoni, con la presencia del juez federal Daniel Rafecas.

Brawer explicó que con el material editado “intentamos que el pasado genere preguntas sobre el presente con la idea de formar ciudadanos críticos en las escuelas”. Como síntesis, recordó la frase del filósofo alemán Theodor W. Adorno: “La exigencia de que Auschwitz no se repita es la primera de todas en la educación”.


lunes, 20 de septiembre de 2010

miércoles, 8 de septiembre de 2010

El Trovador Decapitado


Saben que amo los libros, que sólo su olor, el recorrer las páginas con la punta de los dedos me hace soñar... adoro contarles y que me cuenten libros, pero este caso es especial (como los últimos tres). Estos son nuevitos, de gente que conozco o leo... eso le da un plus muy especial y deseo que lo aprecien como yo. En España pueden adquirirlo, en el resto del mundo podemos leer algunos de sus relatos en:  Juanjo Pero les pido que quienes pueden lo compren... fomentemos la publicación, celebremos a quienes se animan y apoyemos a nuestras/os escritoras/es... desde el lugar que sea.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Crónicas del fuego


De Norberto G. Asquini.

Crónicas del Fuego combina elementos de la no ficción, la crónica periodística, la investigación historiográfica y el ensayo literario para abordar los movimientos políticos y sociales en La Pampa, desde las repercusiones del Cordobazo hasta los difíciles años de la Dictadura Militar. La fuente principal que utiliza el autor es la historia oral, a través de la realización de 200 entrevistas a peronistas, militantes de la Nueva Izquierda, dirigentes sindicales, docentes, estudiantes secundarios y universitarios, periodistas y familiares de víctimas del terrorismo de estado. Se recurrió también a testimonios editos (como el caso del informe Nunca Más) y la consulta de material bibliográfico.

El libro se encuentra organizado en tres apartados y 35 capítulos. El primer apartado comienza con el estallido del Cordobazo y, a partir de sus repercusiones en La Pampa, analiza las movilizaciones que se dieron en ella entre 1969 y 1973. Se destaca la huelga de los obreros de las Salinas Grandes que duró 120 días y movilizó a toda la población pampeana, las medidas de fuerza emprendidas por los empleados de la Casa de Gobierno, estudiantes y religiosos que se solidarizaron con la lucha y el paso de una conducción burocrática en ATE a otra más combativa. Además se extiende a otras luchas populares como la toma de la Universidad de La Pampa para reclamar su nacionalización, la movilización en defensa de los recursos hídricos y la conformación del ala progresista de la Iglesia pampeana.

El segundo apartado se compone de 23 capítulos y analiza el período que va desde la asunción de Cámpora hasta el golpe militar de 1976, centrando su eje principal en los enfrentamientos al interior del peronismo. El giro cada vez mayor hacia la derecha del gobierno peronista nacional y enfrentamiento entre ortodoxos y revolucionarios, llevó a que muchos gobernadores fueran desplazados por sus vicegobernadores, provenientes de la ortodoxia sindical. Esto no fue ajeno en La Pampa, donde el intento de destituir al gobernador Regazzoli, generó un movimiento popular en apoyo al mandatario. Pero además de estos conflictos este apartado analiza la radicalización y movilización universitaria de la época, con las cinco tomas protagonizadas por las diferentes agrupaciones, el sindicalismo combativo (ATE y SIPREN, principalmente) y los comienzos de la represión en las aulas. También le dedica un capítulo (“La sangre derramada”) a las víctimas pampeanas de la represión de las bandas de extrema derecha en los años previos a la dictadura.

El último apartado analiza el golpe militar de 1976 y sus repercusiones en La Pampa y descubre, a lo largo de sus tres capítulos, la militancia revolucionaria de jóvenes pampeanos fuera de la provincia. La obra rescata la historia de estos jóvenes, en su mayoría víctimas del terrorismo de estado, con su nombre y apellido, en un intento de dotarlos de identidad para que dejen de ser simplemente “desaparecidos”, como recuerda Anguita en el prólogo.

Como balance personal me gustaría destacar la importancia de obras que aborden los temas de la historia del tiempo presente a partir de la utilización de testimonios orales de quienes fueron los protagonistas de los hechos. Desde un punto de vista militante, el hecho de que la obra haya visto la luz en una época en donde la participación popular comienza a asomarse lentamente, es muy oportuno ya que nos permite conocer las movilizaciones del pasado y nos ilumina en la lucha hacia un futuro mejor. Aquí considero, es donde radica el principal aporte de Crónicas del Fuego.